Lunes, 27 de abril de 2020. Después de tantos días de confinamiento, un papel en blanco y unos colores ya no resultan tan llamativos como para que los niños sigan echando mano de estos elementos para pasar un rato entretenido en casa.
El proyecto pedagógico ‘El arte de los niños’, dirigido por el artista murciano Rafael Fuster, pone en marcha una nueva iniciativa para seguir despertando la creatividad entre los más pequeños. Comienzan ‘Talleres online desde el Estudio’, donde Fuster abre su estudio a los niños, con el objetivo de enseñarles desde el lugar donde trabajan pintores y escultores, cómo desarrollan su trabajo y para darles a conocer algunos trucos y herramientas con los que seguir realizando sus creaciones en casa sin necesidad de comprar materiales.
Con ‘Talleres online desde el Estudio’, que inició su actividad el pasado viernes 24 de abril, Rafael Fuster hace ver a los más pequeños y a los padres que sus casas son lugares inagotables para desarrollar su creatividad. Todo lo que necesitan para crear lo tienen al alcance de sus manos.
Los talleres ofrecen a los niños en familia una hora y media de conocimiento y entretenimiento. Durante este tiempo también podrán interactuar con otros niños y familias con el fin de crear una gran aula virtual. El taller se imparte los viernes, de 17:30 a 19 horas. También es posible realizar talleres otros días, previa demanda.
Desembocará en una muestra virtual con algunos de los trabajos realizados en este tiempo de confinamiento.
Los talleres virtuales se realizarán a través de videoconferencia. El precio del taller es simbólico, ya que son solamente 5 euros por familia. Más información e inscripción en el teléfono móvil: 617 95 94 32 y en el correo electrónico: info@arslongacomunicacion.es
‘El arte de los niños’
El Proyecto ‘El arte de los niños’ nació en 2014. En junio de 2018 cristalizó gracias al Premio internacional de mecenazgo CRISÁLIDA e impulsado por la agencia Ars Longa Comunicación, a través de la línea de trabajo Ars Longa Proyectos. Desde entonces, hemos visitado museos, galerías, fundaciones e incluso aldeas de la denominada España Abandonada (Torralba de Ribota, Aragón, 2017). Los niños y niñas (de entre 4 y 12 años) han podido pintar en esos centros entre obras de Picasso, Velázquez, Salzillo, Murillo, Gaya, Sorolla…
El artista Rafael Fuster pone al servicio de los más pequeños sus conocimientos en materia de las Bellas Artes, ofreciéndoles técnicas y herramientas inusuales en aulas escolares. Durante años ha impartido talleres dedicado a la educación plástica infantil en museos o centros culturales. Ha tratado de dar un paso más allá: trasladar su experiencia en circuitos de arte contemporáneo a la educación plástica. Se trabajan diferentes disciplinas: collage, escultura, pintura, grabado o reciclaje para fomentar su expresión y creatividad dándole unas pocas, aunque necesarias pautas, huyendo de programas didácticos encorsetados y de aquello que no suponga libertad.
El objetivo es -una vez ofrecidos estos medios- tratar de intervenir lo menos posible en su libertad creadora, estableciendo así en ellos un vínculo entre libertad y creación. Es en esa libertad donde los niños dan lo mejor de sí.
Trabajaron en las salas, a modo de «copistas», donde los niños y niñas seleccionaron qué obras de los museos interpretar, qué les llama la atención. Estamos ante el primer taller donde no se trabaja en un lugar específico, sino por las salas de los museos.
Desde su puesta en marcha el proyecto ‘El arte de los niños’ ha trabajado con centenares de niños en los siguientes museos y espacios culturales: Museo Ramón Gaya, Museo Salzillo, MURAM (Cartagena), MUBAN (Murcia), Museo Arqueológico de Murcia, Festival Saltamontes (Zaragoza), Centro Párraga, Centro Puertas de Castilla, Museo de Arte Contemporáneo de Alicante, Museo Diocesano de Arte Sacro de Orihuela, Espacio Transversal de Arte Contemporáneo, Cuartel de Artillería y la Fundación Trinitario Casanova.
Hasta la fecha se han realizado varias exposiciones con obras muy escogidas; pinturas y esculturas de una frescura y vitalidad tremendas. La última en el Centro Puertas de Castilla.